"EUROPEO 2012: "QUOD NATURA NON DAT, SALMANTICA NON PRAESTAT"/3.
Se resolvió el segundo partido de España con cuatro goles a favor contra Irlanda. Un equipo inocente, fuerte físicamente pero sin dar una sola patada, una afición que cuadruplicaba a la nuestra pero que cantaba sus himnos aún perdiendo por una diferencia importante. Esto es fútbol, qué lealtad... Y hubo un delantero centro fijo, Torres, que marcó dos goles; igual que después hubo un delantero centro que arrancó desde más atrás, Cesc, que también marcó su gol. Entre ambos, Silva dejó su propia marca y yo cantaba, no sé por qué, ¡VA-LE-RÓN!, ¡VA-LE-RÓN!, ¡VA-LE-RÓN!, ¡VA-LE-RÓN!, ¡VA-LE-RÓN!... En un campo rápido porque la lluvia apareció, resbalones en algún momento lo que facilitó el robo de Torres en el primer gol propio, a los cuatro minutos del inicio; ya conocíamos, antes de los himnos nacionales, que Italia y Croacia habían empatado a un gol y que en la última jornada puede haber un empate a cinco puntos entre italianos, croatas y españoles. Pero es que hubo mucho más, sobre todo un juego armónico, colaborativo, de asociación permanente, de más del 60% de posesión pero llegando con suma facilidad a la puerta contraria no obstante haber marcado un solo gol en la primera parte. Otra vez los círculos concéntricos de nuestra Selección funcionaron como un reloj. Muy bien los dos centrales, los dos laterales proyectados y abiertos, los dos medios de contención haciendo una excelente labor de sostén, los Iniesta, Xavi y Silva manejando los ritmos con total maestría, y un delantero móvil que acertó con la portería. Un equipo sólido al fin y al cabo...
¿Creen las gentes aficionadas al fútbol que Vicente del Bosque, o los demás entrenadores, planifican la táctica futbolística tirando un dado al aire, o dibujando con escuadra, cartabón, compás, cartas de navegación, ballestilla, corredera, astrolabio, brújula u otros elementos antiguos de navegación...? Pues claro que no, el fútbol funciona con otra inteligencia, sin necesidad de que sus protagonistas sean licenciados en geometría espacial o alguna otra ciencia rara. "El peor enemigo del ser humano es la ignorancia...", según Jordi Savall, experto en música antigua. Sin embargo, Lázaro de Tormes adquirió su doctorado particular en las calles empedradas de Salamanca, su ciencia consistía en "dar el pego" siempre que podía, engañando sanamente a las gentes pues de ello dependía su supervivencia. Desarrolló su inteligencia natural como los buenos futbolistas aprenden de niños en los baldíos de las ciudades, sin maestros, sin entrenadores, sin árbitros, sin escuelas, sin comodidades y con mucha práctica diaria... Seguro que el Lazarillo nunca conoció la leyenda consignada en el escudo de la Universidad salmantina: "Omnium scientiarum princeps Salmantica docet" ("Salamanca, que es la primera y principal en todas las ciencias, enseña"). Su inteligencia social hacía bueno este otro dicho: "Para saber, no basta leer; hay que andar y ver". Quizás éste pueda ser el gran misterio de nuestros futbolistas, ¿Cómo es posible que un niño de Tarrasa, se juntase con otro de Albacete, coincidiera con otro de Móstoles, congeniara con un sevillano y un salmantino, se asociara con un vasco de San Sebastián y un catalán de Barcelona, etcétera, y llegasen a hacer una cuadrilla, llamada Selección Española, jugando al fútbol como la madre que los parió...?
Sin embargo, la ciencia del fútbol bien jugado no se estudia en la Universidad de Salamanca, de hecho en estas tierras vamos de frustración en frustración con la Unión Deportiva Salamanca, a punto de desaparición por las muchas deudas acumuladas y ubicado en el tercer nivel de la Segunda B española. Se cumplió lo de "Ignorar es más que errar", por lo que "Mejor es no saber que mal saber". En estos últimos días leí algunas ideas de Fernando Alberca en su libro "Todos los niños pueden ser Einstein": "El cerebro es el centro que supervisa el sistema nervioso del ser humano... se encarga de controlar y coordinar el movimiento, el comportamiento y las funciones corporales... Coordina también las emociones, el proceso del conocimiento, la memoria y el aprendizaje (...) Los hemisferios son asimétricos, al igual que los dos lados de la cara de un individuo (...) el hemisferio izquierdo coordina las funciones motoras del hemilado derecho de nuestro cuerpo, y el hemisferio derecho las del hemilado izquierdo (...) la diferencia de competencias entre ambos hemisferios cerebrales parece ser exclusiva del ser humano, y es que las dos mitades del cerebro son complementarias..." Todo ello confirma que nuestro cerebro "trabaja en equipo".
Esta reflexión sirve para rebelarme, una vez más, ante el exceso de ponderación individual que los medios de comunicación llevan a cabo antes, durante, o después, de un partido de fútbol. Es evidente que las personas no actúan mejor, o peor, con el hemisferio izquierdo o con el derecho. Porque todas sus funciones responden a un todo y no a una parte más o menos especializada. Si un equipo actúa como tal, ¿Por qué ese afán enfermizo de destacar a una de sus partes olvidándonos del todo? Sería inconcebible que, después de una jugada maravillosa, de un gol impresionante, de una combinación continuada, asegurásemos que fue el hemisferio derecho de tal o cual futbolista el artífice de la victoria final. O, por el contrario, asegurásemos que el hemisferio izquierdo fue el responsable de aquel error lamentable. O viceversa. En suma, en un partido de fútbol resuelve la individualidad pero casi siempre será gracias al trabajo previo y constante de la colectividad. Debemos acabar con la propaganda del individualismo porque es una demostración de falta de educación deportiva que debemos superar ampliando nuestra visión global.
Otro ejemplo del deporte. Figurémonos una carrera ciclista de 250 kilómetros cuando los máximos calificativos se los asignamos al escalador de turno por haber demarrado, y ganado, en los últimos cinco kilómetros. Es desolador cuando nos olvidamos del equipo del ciclista ganador que trabajó con ahínco durante 245 kilómetros, imponiendo el ritmo, controlando las escapadas de los contrarios, llevando en volandas al líder a la base de la montaña, marcando a los corredores clave de los otros equipos, etc. Y, de pronto, propagamos todo el mérito para el que llegó en primer lugar a meta, el ganador a los efectos oficiales, olvidándonos de los otros nueve ciclistas que gestaron la etapa perfecta. Si en el partido contra Italia del otro día hubiera marcado Torres en los últimos 15 minutos del partido, hubiera servido para flagelar al Seleccionador, consecuencia del viciado argumento de jugar con un 9. Y hubiéramos desmerecido todo lo realizado durante 75 minutos por todo el bloque para madurar el partido, para desgastar al contrario, para desgastarlo psicológicamente mediante la posesión continua, etc. Igual que se llega a decir en el ciclismo que los primeros 245 kilómetros de la etapa sobraron.
"Quod natura non dat, Salmantica non praestat" debe aplicarse como una máxima para aficionados, directivos, medios de comunicación, etcétera. Y no solo a los futbolistas. Hablando de "naturaleza" reflejamos que Alemania es el equipo más joven del Campeonato (24 años de media); España es la selección de menos altura física, a pesar de contar con Llorente de 1,95; Holanda fue la selección más goleadora en la fase de clasificación con 37 goles, Alemania (34), Suecia (31), Portugal (27), y España (26); el jugador más alto es el portero sueco Andreas Isaksson con 1,99 metros y el más bajo es el italiano Giovinco de 1,64 metros. En cuanto a edades, España se mantiene en la media del torneo (27 años), siendo Xavi Hernández el mayor con 32 años y Busquets el más joven con 23 años. La media de altura de las 16 selecciones es de 182 centímetros. La Copa que recibirá el ganador tiene una altura de 60 centímetros y su peso es de 8 kilogramos.
Me pareció interesantísimo el blog de As, firmado por Ignacio Ramos: "La creatina, un suplemento nutricional permitido, es la gran estrella invisible de esta Eurocopa de fútbol. Este año ya la toman todos los futbolistas de élite en Europa. Y lo hacen de forma continuada, a diario, sin los descansos que se recomendaban hace años. Y sin megadosis. (...) Le comento esta información al doctor Nicolás Terrados, posiblemente el mayor experto español en creatina, con estudios publicados en revistas internacionales sobre este compuesto y su efecto sobre el rendimiento físico. "Desde hace años hemos visto que ya no es necesario interrumpir la ingesta de creatina. Los análisis de sangre y orina de los deportistas no sufren ninguna alteración si la consumen de forma continuada. Con tres o cuatro gramos diarios de creatina aportamos las mismas proteínas que si comiéramos un chupetón", sentencia Terrados, hasta hace muy poco médico del Sevilla... Los futbolistas europeos ya han huido de aquellas dosis enormes, de 20 gramos diarios, que se utilizaban hace una década en fases de carga, cuando debían enfrentarse al trabajo de pesas. Aquellos períodos obligaban a fases de descanso. (...) ¿Qué aporta la creatina a un futbolista? Se trata de una amina, un compuesto nitrogenado, y como tal, es decisiva en la construcción de músculo. Ingerir creatina contribuye a la construcción de fibra muscular sin ir acompañada de grasa animal innecesaria, lo que sucede cuando se comen grandes cantidades de carne. En el campo mejora la velocidad punta del futbolista -ligeramente-, la explosividad en las arrancadas, y, especialmente, la capacidad para repetir sprints en poco tiempo. "Esa es la gran virtud de la creatina. Permite a los futbolistas recuperarse más rápidamente de un sprint. Hay más fosfato de creatina disponible en las fibras musculares", indica Terrados. Aceleraciones repetidas en pocos minutos. Lo vamos a ver en esta Eurocopa. Porque todos ingieren creatina a diario".
El bioético Andy Miah, profesor de la Universidad de West Scotland está convencido de que no hay ninguna razón ética para impedir a alguien modificar su cuerpo: "Debemos tener la posibilidad de elegir las cosas que creemos que van a hacer que nuestra vida merezca la pena ser vivida". De la misma manera que, aunque mucha gente crea que conducir una moto es un riesgo estúpido, para algunas personas es una manera de mejorar su vida, de disfrutarla... Uno de sus argumentos sobre esta materia a mí me resulta muy interesante acerca del debate que surge sobre las alineaciones que decide un Seleccionador: "Tener más posibilidades de elegir trae consigo más incertidumbre". Otros dicen, bendito problema cuando se tienen recursos suficientes. Otra cuestión es que el responsable de decidir coincida con nosotros. Quizás el salmantino, Lazarillo de Tormes, diría en la época actual: "Aprende con arte, e irás adelante".
España está en el buen camino. Pero hay que ganar a Croacia para quedar primeros y solventar la mejor opción en los cruces. Puede valer un empate, pero yo no quiero pensar en ello porque si buscas limitaciones, al final las tendrás.
MAROGAR (15.junio.2012)